Big Fish

Ruth Gómez

Big Fish

“Al contar la historia de la vida de mi padre es imposible distinguir entre los hechos y la ficción, entre el hombre y el mito.” Will Bloom

Big Fish o El Gran pez en español, es una película dirigida por Tim Burton basada en tres aspectos filosóficos: la grandeza, la libertad del ser humano y la toma de decisiones. La película de ficción, misma que convierte todos los hechos en cuentos, y en la que se puede encontrar grandes temas clásicos: el amor, la amistad, la familia, la muerte, hace de esta gran potencial para relacionarlo con lo que menciona García Gual en su artículo “Los clásicos nos hacen críticos”, misma que se expondrá a continuación.


Big Fish habla sobre un hombre que no contaba mentiras como pudimos constatar al final, solo que exageraba un poco las verdades y las hacía más verdaderas aun si cabe, es decir las volvía ficción, una ficción que con incontables metáforas trata de explicar cómo estas historias que el protagonista contaba son capaces de volverse mitos,  mismos que, son la narración de acciones de seres que altera las verdaderas cualidades de sí mismo y del resto para darles más valor de lo que en realidad tenían.
“Las grandes obras nos ayudan a entender aspectos esenciales de la condición humana: su mensaje se reinterpreta con los años, abre nuevos horizontes y moldea a personas más críticas e imaginativas” Carlos García Gual

El fin de volver míticas a sus historias, es como se relaciona con el articulo planteado por García Gual “Los clásicos nos hacen críticos”; la naturaleza de un mito es circular, es decir que se trasforma en un clásico, un clásico que cada vez que lo lees puede decirte cosas diferentes.

Del mismo modo hay q recatar que las historias contadas por el protagonista, son un símbolo de lo perpetuo, de lo inmortal, la película nos proyecta como los mitos nunca deben morir y efectivamente nunca lo hacen mientras los tengamos presentes en nuestras vidas y se transmita de generación en generación. Estas historias al igual que los libros clásicos son capaces de crear por así decirlo, una pequeña choza en algún rincón de nuestro cerebro, que salen a jugar de vez en cuando con nuestra imaginación e influyen en cuanto a cómo miramos algunos de los  aspectos más importantes de la vida.

Ahora bien, la película cuenta con muchos personajes interesantes, como olvidar a la pequeña niña del pueblo de Spectre, a su amigo el gigante o al famoso poeta Norther Winslowel. Todos ellos cargados de metáforas interminables o hasta incomprensibles en cierto punto. Pero principalmente son Edward y Will su hijo el periodista, quienes tienen una interesante relación, de distanciamiento, no solo proyectada en su obvias disputas sino también en como son proyectadas las escenas de ambos personajes. Así Tim Burton nos muestra entre los saltos del pasado y presente en el que está estructurado el film, que pende de una gran estética del color, que separa el presente con el pasado, es decir, la realidad con la ficción.

De manera que Edward es el fin para entender los simbolismos del pez y la pecera, la libertad y la grandeza. Él es un viejo que a pesar de cuenta estas historias sobre su vida, que exaltan a los personajes de las mismas y se convierten en mito, como antes he dicho, para que sean historias eternas, como lamentablemente no lo es su vida terrenal. Pero que sin duda mientras agoniza, estas lo mantienen a flote. Edward tiene la certeza de que su vida estaba destinada a hacer grandes cosas, cosas que no encontraría en su pueblo que de alguna manera representa una “pecera” pequeña y segura, donde nada ese “pez”.

Entonces él no se conformaría, con la convicción de su muerte, era capaz de aventurarse a cosas que el resto no lo haría por temor a morir. Toma la decisión, y va en busca de la felicidad, de la vida, y de encontrar el amor. Se convierte en el “gran pez”, en una “gran pecera”. Y de hecho ese mismo hecho de no tener límite se convirtió en la mala relación con su hijo, pues no se sentía satisfecho ni en su propio hogar.

La película sin duda contiene muchas escenas de las cuales podría hacerse un análisis extenso, pero una muy pelicular es el aparecimiento del pueblo de Spectre, ahí encontré un sin número de simbolismos que me gustaría resaltar, entre los más notorios, es que es un pueblo perdido en medio de la nada, la singularidad de su gente, el aspecto de utópico que le dan al pueblo, los zapatos colgados en un cordel, de la famosa frase (colgar los tenis) y el singular hecho de la pequeña niña que resulta ser una “bruja” planteada en el principio, resaltando el estado cíclico de la historia.

Big Fish es un film que funciona bien como historia de ficción, no siendo necesario buscar más sentido a las fantasías de Edward, y de las cuales cada persona podía tomar la decisión sobre si creer en ellas o no.  Pues es justamente Will quién decisión no creer más las historias de su padre, era incapaz de entender el comportamiento fabulario de su padre, creía que ocultaba su verdadero ser y decide apartarse, pero al constatar la verdad sobre cada historia se dio cuenta que contaba estas historias dejarían en la gente una huella que nada más lo haría. Entonces ocurre un quiebre, hasta el punto de decidir si creer. Termina comprendiendo que la fantasía en esta vida es a veces tanto o más necesaria que la realidad.

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