CRÓNICA

Quito, 29 de septiembre de 2017

YouTubers, el nuevo fenómeno de influencia para los Millenials

Por Ruth Gómez

Las nuevas generaciones se ven influenciados por el fenómeno de YouTube y más específicamente los YouTubers, que son personas normales o comunes subiendo videos periódicamente. Los niños y jóvenes se pasan horas enganchados a la pantalla del ordenador observando cómo sus personajes favoritos suben un vídeo en el que básicamente hacen el tonto un rato, muestran sus geniales personalidades y provocan una carcajada rápida.

Adriana Vergara, madre y psicóloga de una institución educativa, dice que recuerda cuando ella tenía 12 o 15 años y hablaba de que quería ser de grande, y siempre mencionaba a aquellos que más admiraba y que la influenciaban de cierta manera como un doctor o un arquitecto, e incluso una bailarina, pero ahora la admiración por los nuevos influencers, “YouTubers”, hace que para los niños ser un YouTuber sea parte de sus sueños.

Hace dos meses, Enrique Morales Areque, mejor conocido como KikeJav, subió un video donde hablaba sobre la SENESCYT, la Secretaría de Educación Superior, Ciencia y Tecnología, en el que se quejaba sobre que el sistema de educación no sirve, y saber materias como ciencias sociales o naturales “no es importante”. KikeJav comentaba que iba a dejar de estudiar debido a que tenía que tomar decisiones en su vida, porque cualquier momento podría morir y no quería esperar años para lograr su sueño, así que se convertiría en un YouTuber de profesión. Este video se viralizó y el comenzó a ganar popularidad como YouTuber ecuatoriano llegando a tener 148 mil suscriptores y 603 mil de visualizaciones en sus videos.

Los famosos YouTubers han acaparado las redes sociales, ahora son influencers, figuras públicas, e incluso líderes de opinión y pueden dar a jóvenes la idea errónea de “estudiar no es necesario, hacer videos es más fácil, te vuelve popular y te genera ganancias.”

Este chico, solo es un caso más de jóvenes que abandonan los estudios por hacerse famosos. Pero, ¿hacer videos para YouTube puede considerarse una profesión seria?, KikeJav dijo que en algún punto de su vida tendrá que hacer otra cosa aparte de videos para YouTube, incluso dijo que de una u otra forma entraría a la universidad, porque él sabe que no puede llegar lejos sin alguna preparación y más en nuestro país, donde ser YouTuber no ha sido un Boom como en otros países. Y realmente ¿Cuánto les puede durar la fama?, pero mientras la suya continúe seguirá haciendo videos, quizás uno o dos años más.

Esta opinión también la tiene Ricardo Vejar, más conocido como RickUio, otro YouTuber ecuatoriano que como KikeJav piensa que sin estudios o algún tipo de preparación no podrá llegar lejos, y es por esa razón que aunque ya cuenta con un título en gastronomía, no ha dejado ahí el asunto y en la actualidad está cursando la carrera de comunicación. “Entre mejor preparado este, tengo más posibilidades de no solo hacerme famoso como YouTuber, sino que también podría llegar a televisión o cine”. RickUio confiesa que le apasiona mucho hacerse conocer y en YouTube encontró esa gran oportunidad, por ello dice que seguirá subiendo contenido, preparándose y aprendiendo, ya que hacer videos es “una manera empírica de aprender sobre edición y perderle el miedo a la cámara”.

Los influencers tienen ese impacto tan grande gracias a miles de espectadores que pasan en promedio, más de seis horas frente a la pantalla de un dispositivo que en otra cosa, según informó la CNN en español.

Adriana Vergara, psicóloga estudiantil, comenta  que “eso engancha”,  ella que no sigue a ningún YouTuber y cuando de repente se topa con algún vídeo de ese tipo, se queda engatusada, como si su cerebro “hubiera hecho mutis por el foro y se hubiera dejado allí tirada.” Eso no tiene nada de malo, es entretenido, si pasamos por alto lo ridículas que son algunas de las situaciones.

Seguro KikeJav y RickUio, no son los únicos YouTubers ecuatorianos que expresan su opinión, pero en Ecuador aspirar a ser un YouTuber muy famoso todavía es un sueño, el principal obstáculo que Google no tiene representantes en el país, pero poco a poco estos jóvenes han empezado a surgir e incluso algunos ya cuentan con managers, es el caso del YouTuber Diego Villacís.

Diego Villacís, empezó en el 2012 junto a un grupo de amigos, a subir videos a YouTube, sobre humor de cosas cotidianas. Estaba en el colegio y tenía el canal Chimboster, gracias a tutoriales, criticas feísimas que le enojaban, pero que luego aprendió a aceptarlas y a la constancia, es que Diego a partir de subir videos, fue contratado por Coca-Cola FM para hacer radio. Él no es locutor profesional ni nada por el estilo, “YouTube fue una escuela para mí” dice Diego.

Lo cierto es que ser YouTuber puede ser muy rentable, las ganancias no solo proviene de las producciones de videos como se demostró en el caso de Diego, sino que consiguen patrocinadores, participaciones en eventos, etc. Ha eso es lo que aspiran la mayoría de ellos, aunque en Ecuador sigue siendo un sueño a medias, se espera que en los próximos años Google se fije en Ecuador y así la gran industria de YouTube y YouTubers ecuatorianos tenga más seguidores.